TREINTENA A SAN JOSÉ: DÍA 30
San José, varón prudente y justo, une tu oración a la nuestra.
San José, varón prudente y justo, ora por nosotros.
San José, varón prudente y justo, intercede por nosotros.
Amén
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor Dios nuestro.
En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén
1. Rosario a San José
CONTEMPLAR LOS 8 MISTERIOS:
1. El anuncio del ángel de que lo concebido en María es obra del Espíritu Santo.
2. La búsqueda de posada en Belén.
3. El nacimiento del Niño Jesús en Belén.
4. La presentación del Niño Jesús en el templo, ofreciendo un par de tórtolas o dos palomas.
5. La huída a Egipto con Jesús y con María.
6. El regreso de la Sagrada Familia a Nazaret.
7. La pérdida y hallazgo del Niño Jesús en el templo.
8. La gloriosa muerte de San José, en brazos de Jesús y de María.
MODO DE REZAR EL ROSARIO:
Se menciona el Misterio y se reza 7 veces en cada Misterio (en honor a los 7 dolores y 7 gozos de San José) lo siguiente:
V/ San José, custodio de los Sagrados Corazones de Jesús y de María.
R/ Inflama mi corazón para que en él solo reine, Jesús, como reinó en tu santo Corazón.
En vez del Gloria, se reza:
V/ Jesús, José y María
R/ Les doy el corazón y el alma mía.
Al final del Rosario, se reza 3 veces:
V/ San José, patrono de los devotos de los Sagrados Corazones de Jesús y de María.
R/ Ruega por nosotros.
2. Letanías a San José
Señor, ten misericordia de nosotros.
Cristo, ten misericordia de nosotros.
Señor, ten misericordia de nosotros.
Cristo óyenos.
Cristo escúchanos.
Dios Padre celestial, ten misericordia de nosotros.
Dios Hijo, Redentor del mundo, ten misericordia de nosotros.
Dios, Espíritu Santo, ten misericordia de nosotros.
Santa Trinidad, un solo Dios, ten misericordia de nosotros.
Santa María, ruega por nosotros.
San José, ruega por nosotros.
Ilustre descendiente de David, ruega por nosotros.
Luz de los Patriarcas, ruega por nosotros.
Esposo de la Madre de Dios, ruega por nosotros.
Custodio del Redentor, ruega por nosotros.
Casto guardián de la Virgen, ruega por nosotros.
Padre nutricio del Hijo de Dios, ruega por nosotros.
Celoso defensor de Cristo, ruega por nosotros.
Servidor de Cristo, ruega por nosotros.
Ministro de salud, ruega por nosotros.
Jefe de la Sagrada Familia, ruega por nosotros.
José, justísimo, ruega por nosotros.
José, castísimo, ruega por nosotros.
José, prudentísimo, ruega por nosotros.
José, valentísimo, ruega por nosotros.
José, fidelísimo, ruega por nosotros.
Espejo de paciencia, ruega por nosotros.
Amante de la pobreza, ruega por nosotros.
Modelo de trabajadores, ruega por nosotros.
Gloria de la vida doméstica, ruega por nosotros.
Custodio de las vírgenes, ruega por nosotros.
Sostén de las familias, ruega por nosotros.
Apoyo en las dificultades, ruega por nosotros.
Consuelo de los desgraciados, ruega por nosotros.
Esperanza de los enfermos, ruega por nosotros.
Patrón de los exiliados, ruega por nosotros.
Patrón de los afligidos, ruega por nosotros.
Patrón de los pobres, ruega por nosotros.
Patrón de los moribundos, ruega por nosotros.
Terror de los demonios, ruega por nosotros.
Protector de la Santa Iglesia, ruega por nosotros.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo.
Perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo.
Escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo.
Ten misericordia de nosotros.
V/ Le nombró administrador de su casa
R/ Y príncipe de toda su posesión
V/ San José, protector nuestro
R/ Ruega por nosotros.
Oremos:
Oh Dios, que en tu inefable providencia,
te dignaste elegir a San José por Esposo de tu Santísima Madre:
concédenos, te rogamos, que merezcamos tener por intercesor en el cielo
al que veneramos como protector en la tierra.
Te lo pedimos a Ti, que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén
3. Meditación del día 30
En esta treintena el sol se mantendrá sobre ti.
En esta treintena quiero hacer florecer en ti los lirios más perfumados del cielo, porque en tu corazón habita Jesús. Cuidas de no mancharlo con el pecado, haces un esfuerzo diario por mantenerte en estado de gracia, eres hábil para huir de la tentación porque sabes que eres débil y si te expones al peligro puedes caer fácilmente.
En esta treintena quiero regalarte algunos toques de amor en tu corazón para que Jesús ocupe el primer puesto en tu vida y sin Él te sientas morir de tedio y melancolía.
En esta treintena alcanzarás el favor de Dios, tan solo ten un poco de fe y, si quieres, las montañas pueden cambiar de lugar, el fuego no te hará daño, y si estuvieras en medio del océano jamás te ahogarías.
En esta treintena el sol se mantendrá sobre ti, no conocerás la oscuridad, no pasarás por fuertes borrascas o tempestades, porque el señor te llevará en su Sagrado Corazón que es remanso de paz y fuente inagotable de misericordia.
En esta treintena podrás evidenciar el poder de intercesión que Dios me ha otorgado para todos mis devotos. Este hallazgo Divino es para que lo muestres al mundo entero, porque como te beneficio a ti, quiero beneficiar a todos mis hijos.
En esta treintena quiero dejar un recuerdo hermoso en ti. El humilde carpintero de Nazaret ha trabajado en tu vida interior, ha limpiado el comején de tu corazón, ha dado brillo a tu espíritu, ha intercedido ante Jesús y María para que sean tu auxilio y socorro en tus necesidades materiales y espirituales”.
4. Oración final
Glorioso patriarca San José, cuya intercesión sabe hacer posibles las cosas imposibles, ven en mi ayuda en estos momentos de angustia y dificultad. Toma bajo tu protección las situaciones tan serias y difíciles que te encomiendo, a fin de que tengan una feliz solución. Mi bien amado Padre: toda mi confianza está puesta en ti. Y, dado que lo puedes todo ante Jesús y María, muéstrame que tu bondad es tan grande como tu poder. Amén