TREINTENA A SAN JOSÉ: DÍA 13
San José, varón prudente y justo, une tu oración a la nuestra.
San José, varón prudente y justo, ora por nosotros.
San José, varón prudente y justo, intercede por nosotros.
Amén
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor Dios nuestro.
En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén
1. Rosario a San José
CONTEMPLAR LOS 8 MISTERIOS:
1. El anuncio del ángel de que lo concebido en María es obra del Espíritu Santo.
2. La búsqueda de posada en Belén.
3. El nacimiento del Niño Jesús en Belén.
4. La presentación del Niño Jesús en el templo, ofreciendo un par de tórtolas o dos palomas.
5. La huída a Egipto con Jesús y con María.
6. El regreso de la Sagrada Familia a Nazaret.
7. La pérdida y hallazgo del Niño Jesús en el templo.
8. La gloriosa muerte de San José, en brazos de Jesús y de María.
MODO DE REZAR EL ROSARIO:
Se menciona el Misterio y se reza 7 veces en cada Misterio (en honor a los 7 dolores y 7 gozos de San José) lo siguiente:
V/ San José, custodio de los Sagrados Corazones de Jesús y de María.
R/ Inflama mi corazón para que en él solo reine, Jesús, como reinó en tu santo Corazón.
En vez del Gloria, se reza:
V/ Jesús, José y María
R/ Les doy el corazón y el alma mía.
Al final del Rosario, se reza 3 veces:
V/ San José, patrono de los devotos de los Sagrados Corazones de Jesús y de María.
R/ Ruega por nosotros.
2. Letanías a San José
Señor, ten misericordia de nosotros.
Cristo, ten misericordia de nosotros.
Señor, ten misericordia de nosotros.
Cristo óyenos.
Cristo escúchanos.
Dios Padre celestial, ten misericordia de nosotros.
Dios Hijo, Redentor del mundo, ten misericordia de nosotros.
Dios, Espíritu Santo, ten misericordia de nosotros.
Santa Trinidad, un solo Dios, ten misericordia de nosotros.
Santa María, ruega por nosotros.
San José, ruega por nosotros.
Ilustre descendiente de David, ruega por nosotros.
Luz de los Patriarcas, ruega por nosotros.
Esposo de la Madre de Dios, ruega por nosotros.
Custodio del Redentor, ruega por nosotros.
Casto guardián de la Virgen, ruega por nosotros.
Padre nutricio del Hijo de Dios, ruega por nosotros.
Celoso defensor de Cristo, ruega por nosotros.
Servidor de Cristo, ruega por nosotros.
Ministro de salud, ruega por nosotros.
Jefe de la Sagrada Familia, ruega por nosotros.
José, justísimo, ruega por nosotros.
José, castísimo, ruega por nosotros.
José, prudentísimo, ruega por nosotros.
José, valentísimo, ruega por nosotros.
José, fidelísimo, ruega por nosotros.
Espejo de paciencia, ruega por nosotros.
Amante de la pobreza, ruega por nosotros.
Modelo de trabajadores, ruega por nosotros.
Gloria de la vida doméstica, ruega por nosotros.
Custodio de las vírgenes, ruega por nosotros.
Sostén de las familias, ruega por nosotros.
Apoyo en las dificultades, ruega por nosotros.
Consuelo de los desgraciados, ruega por nosotros.
Esperanza de los enfermos, ruega por nosotros.
Patrón de los exiliados, ruega por nosotros.
Patrón de los afligidos, ruega por nosotros.
Patrón de los pobres, ruega por nosotros.
Patrón de los moribundos, ruega por nosotros.
Terror de los demonios, ruega por nosotros.
Protector de la Santa Iglesia, ruega por nosotros.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo.
Perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo.
Escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo.
Ten misericordia de nosotros.
V/ Le nombró administrador de su casa
R/ Y príncipe de toda su posesión
V/ San José, protector nuestro
R/ Ruega por nosotros.
Oremos:
Oh Dios, que en tu inefable providencia,
te dignaste elegir a San José por Esposo de tu Santísima Madre:
concédenos, te rogamos, que merezcamos tener por intercesor en el cielo
al que veneramos como protector en la tierra.
Te lo pedimos a Ti, que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén
3. Meditación del día 13
No dudes en venir a mi humilde carpintería.
Hijo mío, no dudes en consagrar tu vida al servicio de Dios, Jesús ha de ser tu amo y Señor, ponte bajo sus órdenes, desgasta tus energías en predicar su Palabra a tiempo y a destiempo, en dar a conocer las riquezas insondables de su Divino Corazón.
No dudes en venir a mi humilde carpintería cada vez que te sientas triste o los problemas intenten derribarte, o cuando llegue a ti la enfermedad de manera inesperada. Yo, como esperanza de los enfermos, te daré alivio en tu sufrimiento, clamaré a mi hijo que te sostenga y que te sane de tus dolencias si va en orden a su divina voluntad.
No dudes en venir a mi humilde carpintería cada vez que tu corazón esté oprimido por el dolor, o cuando los hombres te hayan negado una ayuda en un momento de gran necesidad.
No dudes en venir a mi humilde carpintería cuando te sientas solo o quieras llorar a escondidas para que no seas visto, cuando te sientas débil y creas que has perdido el impulso para proseguir tu camino, cuando la tentación se venga sobre ti como un huracán violento; con la ayuda de Dios sabré dirigir tu alma, te libraré de muchos peligros, haré que cambie tu manera de pensar y de ver la vida, le pediré al Señor que te colme de gracia y de bendición.
4. Oración final
Glorioso patriarca San José, cuya intercesión sabe hacer posibles las cosas imposibles, ven en mi ayuda en estos momentos de angustia y dificultad. Toma bajo tu protección las situaciones tan serias y difíciles que te encomiendo, a fin de que tengan una feliz solución. Mi bien amado Padre: toda mi confianza está puesta en ti. Y, dado que lo puedes todo ante Jesús y María, muéstrame que tu bondad es tan grande como tu poder. Amén