Rosario al Espíritu Santo
INTRODUCCIÓN
¿Qué es el Rosario al Espíritu Santo?
Es una hermosa forma de acercarnos al Espíritu Santo e implorar su auxilio, pedir sus dones y que nos llene de sus frutos. Acudamos a Él en cualquier momento que necesitemos su ayuda, su Luz y sus inspiraciones para cumplir la Voluntad del Padre. En el rosario al Espíritu Santo, le pedimos su intercesión.
¿En qué consiste?
Consiste en 7 Misterios con sus correspondientes oraciones introductorias y finales.
¿Cómo se reza?
Se puede utilizar un rosario que tenga siete cuentas grandes y siete cuentas pequeñas; pero si no lo tienes, puedes utilizar un rosario normal y vas siguiendo las cuentas hasta completarlo, tal y como aparece aquí en las instrucciones.
ORACIONES INTRODUCTORIAS
En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén
Se reza el Credo, un Padrenuestro y Gloria.
Jaculatoria: Padre, envíanos al Paráclito prometido por nuestro Señor Jesucristo. Amén
Luego, se recita la Secuencia al Espíritu Santo:
Ven Espíritu Divino,
manda tu luz desde el cielo,
Padre amoroso del pobre;
don en tus dones espléndido;
luz que penetra las almas;
fuente del mayor consuelo.
Ven, dulce huésped del alma,
descanso de nuestro esfuerzo,
tregua en el duro trabajo,
brisa en las horas de fuego,
gozo que enjuga las lágrimas
y reconforta en los duelos.
Entra hasta el fondo del alma,
divina luz y enriquécenos.
Mira el vacío del hombre
si Tú le faltas por dentro;
mira el poder del pecado
cuando no envías tu aliento.
Riega la tierra en sequía,
sana el corazón enfermo,
lava las manchas, infunde
calor de vida en el hielo,
doma el espíritu indómito,
guía al que tuerce el sendero.
Reparte tus Siete Dones
según la fe de tus siervos.
Por tu bondad y tu gracia
dale al esfuerzo su mérito;
salva al que busca salvarse
y danos tu gozo eterno. Amén
MISTERIOS
PRIMER MISTERIO
En la cuenta grande rezamos:
Honramos al Espíritu Santo y adoremos al amor sustancial que procede del Padre y del Hijo y los une en una Caridad infinita y eterna.
Contemplamos el Don del Temor de Dios, que nos llena de respeto por Nuestro Dios y nos aparta de los pecados.
En cada una de las 7 cuentas pequeñas rezamos:
•Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles.
•Y enciende en ellos el fuego de tu amor.
SEGUNDO MISTERIO
En la cuenta grande rezamos:
Honramos la operación del Espíritu Santo y adorémosle, porque hizo inmaculada a María en su Concepción y la santificó con la plenitud de su gracia.
Contemplamos el Don de Piedad: que nos hace amar a Dios y a todo lo relacionado con Él. Por ejemplo: a Nuestra Madre, a los Santos, a la Iglesia y a nuestro prójimo.
En cada una de las 7 cuentas pequeñas rezamos:
•Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles.
•Y enciende en ellos el fuego de tu amor.
TERCER MISTERIO
En la cuenta grande rezamos:
Honremos la operación del Espíritu Santo y adorémosle, porque hizo a la Santísima Virgen Madre del Verbo divino en el Misterio de la Encarnación.
Contemplamos el Don de Fortaleza: La cual nos mantiene firmes ante las adversidades y nos ayuda a perseverar hasta el final.
En cada una de las 7 cuentas pequeñas rezamos:
•Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles.
•Y enciende en ellos el fuego de tu amor.
CUARTO MISTERIO
En la cuenta grande rezamos:
Honramos la operación del Espíritu Santo y adorémosle, porque dio la vida a la Iglesia en el día glorioso de Pentecostés.
Contemplamos el Don de Ciencia: Que nos permite ver y sentir la importancia de todo lo creado por Nuestro Señor. Nos permite alabarlo por todo lo que ha hecho por nosotros y siempre guiarnos con su luz.
En cada una de las 7 cuentas pequeñas rezamos:
•Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles.
•Y enciende en ellos el fuego de tu amor.
QUINTO MISTERIO
En la cuenta grande rezamos:
Honremos la operación del Espíritu Santo y adorémosle, porque reside de una manera permanente en la Iglesia y la asiste, según la promesa divina, hasta la consumación de los siglos.
Contemplamos el Don de Consejo, para que siempre podamos tomar las mejores decisiones. Y nunca olvides que siempre lo harás tomado de la mano de Nuestro Dios.
En cada una de las 7 cuentas pequeñas rezamos:
•Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles.
•Y enciende en ellos el fuego de tu amor.
SEXTO MISTERIO
En la cuenta grande rezamos:
Honramos la operación del Espíritu Santo y adorémosle, porque creó en la Iglesia al nuevo Cristo, que es el sacerdote, y confirmo la plenitud del sacerdocio a sus obispos.
Contemplamos el Don de Entendimiento: Porque gracias al entendimiento podemos comprobar que todas las verdades que conocemos como cristianos, son ciertas.
En cada una de las 7 cuentas pequeñas rezamos:
•Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles.
•Y enciende en ellos el fuego de tu amor.
SÉPTIMO MISTERIO
En la cuenta grande rezamos:
Honremos la operación del Espíritu Santo y adorémosle en la virtud heroica de los santos en la Iglesia, obra secreta y maravillosa del Santificador Omnipotente.
Contemplamos el Don de Sabiduría: El más perfecto de todos los dones. La sabiduría es capaz de reforzar nuestra fe y esperanza, haciendo que amemos aún más a Nuestro Dios.
En cada una de las 7 cuentas pequeñas rezamos:
•Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus fieles.
•Y enciende en ellos el fuego de tu amor.
LETANÍAS AL ESPÍRITU SANTO
Señor, ten piedad de nosotros. Señor, ten piedad de nosotros.
Cristo, ten piedad de nosotros. Cristo, ten piedad de nosotros.
Señor, ten piedad de nosotros. Señor, ten piedad de nosotros.
Padre omnipotente, ten piedad de nosotros.
Jesús, Hijo eterno del Padre y redentor del mundo, sálvanos.
Espíritu del Padre y del Hijo y amor infinito del Uno y del Otro, santifícanos.
Trinidad santísima, óyenos.
Espíritu Santo que procedes del Padre y del Hijo, ven a nosotros.
Promesa del Padre, ven a nosotros.
Don de Dios altísimo, ven a nosotros.
Rayo de luz celeste, ven a nosotros.
Fuente de agua viva, ven a nosotros.
Espíritu de amor y de verdad, ven a nosotros.
Fuego abrasador, ven a nosotros.
Autor de todo bien, ven a nosotros.
Unción espiritual, ven a nosotros.
Caridad ardiente, ven a nosotros.
Espíritu de Sabiduría, ven a nosotros.
Espíritu de Entendimiento, ven a nosotros.
Espíritu de Consejo y Fortaleza, ven a nosotros.
Espíritu de Ciencia y de Piedad, ven a nosotros.
Espíritu de Temor del Señor, ven a nosotros.
Espíritu de Gracia y de Oración, ven a nosotros.
Espíritu de Paz y de Dulzura, ven a nosotros.
Espíritu de Modestia y de Inocencia, ven a nosotros.
Espíritu Consolador, ven a nosotros,
Espíritu Santificador, ven a nosotros.
Espíritu que gobiernas la Iglesia, ven a nosotros.
Espíritu que llenas el Universo, ven a nosotros.
Espíritu de adopción de los hijos de Dios, ven a nosotros.
Espíritu Santo, imprime en nosotros el horror al pecado, te rogamos, óyenos.
Espíritu Santo, ven a renovar la faz de la tierra, te rogamos, óyenos.
Espíritu Santo, derrama tu Luz en nuestra inteligencia, te rogamos, óyenos.
Espíritu Santo, graba tu Ley en nuestros corazones, te rogamos, óyenos.
Espíritu Santo, enciéndenos en el Fuego de tu Amor, te rogamos, óyenos.
Espíritu Santo, ábrenos el tesoro de tu Gracia, te rogamos, óyenos.
Espíritu Santo, enséñanos a orar como se debe, te rogamos, óyenos.
Espíritu Santo, ilumínanos con tus inspiraciones celestiales, te rogamos, óyenos.
Espíritu Santo, concédenos la única ciencia necesaria, te rogamos, óyenos.
Espíritu Santo, inspíranos la práctica de las Virtudes, te rogamos, óyenos.
Espíritu Santo, haz que perseveremos en tu Justicia, te rogamos, óyenos.
Espíritu Santo, sé Tú mismo nuestra recompensa, te rogamos, óyenos.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, envíanos tu Espíritu Santo.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, derrama en nuestras almas los Dones del Espíritu Santo.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo, infúndenos el Espíritu de Sabiduría y Devoción.
Ven Espíritu Santo, llena de tus dones los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor. Envía tu Espíritu y todo será creado. Y renovarás la faz de la tierra.
ORACIONES FINALES
Oh. Dios que con la Luz del Espíritu Santo enseñas a los fieles la verdad, concédenos conocerla en el mismo Espíritu y gozar siempre de sus consuelos celestiales. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén
Oremos
Señor, que la fortaleza del Espíritu Santo venga en nuestra ayuda para que se digne lavar las manchas de nuestros corazones y protegernos contra nuestros enemigos.
Por Cristo Nuestro Señor. Amén
CONSAGRACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
Recibe, ¡Oh, Espíritu Santo!, la consagración perfecta y absoluta de todo mi ser que hago en este día, dígnate ser en adelante, en cada uno de los instantes de mi vida y en cada una de mis acciones: mi Director, mi Luz, mi Guía, mi Fuerza y todo el Amor en mi corazón.
Yo me abandono, sin reserva a tus Divinas Operaciones y quiero ser siempre dócil a tus Santas Inspiraciones.
¡Oh, Espíritu Santo!, dígnate transformarme con María y en María, según el modelo de nuestro amado JESÚS, para gloria del Padre y salvación del mundo.
Gloria al Padre Creador; Gloria al Hijo Redentor; Gloria al Espíritu Santo Santificador.
(Rezar un Padrenuestro por las intenciones del Sumo Pontífice)
En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén