Los Siete Domingos de San José
Los siete domingos de San José, es una antigua tradición en la Iglesia que se remonta al Siglo XVI.
En cada domingo, contemplaremos los dolores y gozos de San José, los principales misterios que acontecieron en su vida.
Iremos contemplando y meditando con su ayuda, cada dolor, cada momento por los que tuvo que pasar por distintas pruebas a lo largo de su vida, y cómo su entrega, su fe y obediencia a Dios fue marcándole el camino para seguir adelante, aún sin comprender del todo, en algunos momentos qué hacer o qué era lo que le tenía guardado para él.
En sus gozos podemos ver cómo Dios va actuando con un plan siempre mejor que el nuestro, va respondiendo a veces de distinta forma a la que teníamos pensada, pero que en definitiva es un plan mejor.
A través de ellos, podemos conocer un poco más la figura de José y cómo puede ayudarnos en nuestra vida, día a día.
Descubrimos su vida marcada por la fe y la obediencia. Vemos a través de su experiencia, cómo vive delante de Dios, su aceptación sin reservas de la voluntad de Dios, su entrega en definitiva, su total confianza en manos de Dios.
A él podemos acudir en nuestras necesidades, solicitando su ayuda e intercesión.
Siguiendo una antigua tradición y como recuerdo de los principales dolores y gozos de la vida de San José, la Iglesia dedica los siete domingos anteriores a su festividad (19 de marzo). También se puede practicar esta devoción en cualquier otra época del año.